Juicio por Jerez: el fiscal acusó a los imputados y pidió penas de hasta 4 años

Entre los elementos recolectados durante el juicio oral el Fiscal Dr. Diego Bensi reconstruyó ayer las principales declaraciones para justificar su interpretación y pedir las penas de prisión de hasta 4 años para todos los imputados en el encubrimiento por la desaparición de Darío Jerez.

Cuatro años para Carlos Subirol y Alejandro Muñoz; 3 años y 6 meses para Jorge Grande, Cristian Ibarra y Daniel Lopez y 3 años y 8 meses para Leandro Alzugaray. Este último esta imputado por falso testimonio.

Tomando como base las declaraciones del Comisario Eduardo Seira y del oficial de policía Joaquín Coronel, y apoyado en declaraciones que entendía corroboraban estas versiones, el fiscal sostuvo que estas personas habían participado del secuestro y muerte de Darío Jerez.

De acuerdo a los testimonios citados Jerez era una excelente persona y muy buen padre de familia; y por sus características personales –entiende el fiscal- resulta imposible pensar que pudiera ausentarse solo y sin motivos. “No quedan dudas del desenlace y que fue obligado a alejarse del lugar y permanecer en un lugar que no consintió” dijo textualmente. La especulación es que posteriormente lo mataron.

La recreación de los testimonio fue extensa y en ella detalló que aunque “no se acreditó el móvil en forma fehaciente” de la desaparición, esta “tiene que ver con su actividad en Comprar”.

Los fundamentos principales por los que arriba a la conclusión están basados en las declaraciones de Seira y Coronel que dicen haber escuchado de Leandro Alzugaray que “quienes lo desaparecieron fueron Sarraillé, Rios y Bin”. Todas estas personas, señaló el fiscal, tenían relación directa con los imputados. Además el cruce de llamadas muestra una “enorme cantidad de comunicaciones entre Alzugaray y el municipio o con Grande” dijo el Dr. Diego Bensi, por lo que “se deben valorar los dichos de Alzugaray mientras estaba detenido en Gral. Madariaga”.

El presunto móvil estaría relacionado para el fiscal con unos cheques que Alzugaray tenía en su poder y que según Coronel eran los mismos que se encontraron en un allanamiento a la firma Comprar. Esos son los dichos que aportó Coronel y corroboró Seira.

Para fundar su acusación sobre cada uno, el fiscal entendió que quedó demostrado que Subirol borró pruebas y trató de entorpecer la investigación. “Daba la impresión que Subirol sabía lo que había pasado” por su modo de comportarse y sus dichos posteriores a la desaparición. Un caso similar es Alejandro Muñoz, quien según el fiscal es “la última persona en ver con vida a Jerez”, y al negarlo “eligió encubrir a quienes fueron los autores materiales.

El alegato del Dr. Diego Bensi reconstruyó la declaración del testigo Torchetti para incriminar a Jorge Grande que “indujo a Villalba a mentir durante el juicio”. Villalba había declarado que Jerez estuvo muerto tres meses en la morgue del hospital. Además según señala el fiscal Muñoz era testaferro de Jorge Grande. También el fiscal valoró el testimonio de la madre de Gustavo Maidana y la maestra de la escuela especial para acusar a Daniel López y Cristian Ibarra quienes le dictaron una nota para que llamara telefónicamente inculpándose el hecho y así desviar la investigación.

Las razones del Dr. Paul Orellano

El defensor oficial que representa a Leandro Alzugaray fue el único defensor que alegó luego del pedido de la fiscalía y de la Dra. Marta Esponda que señaló “liviandad y desprolijidad de la investigación” y la politización del caso “que no le hizo nada bien”.

En un alegato preciso y contundente, Orellano sostuvo que “Seira y Coronel no vieron nada” y todo lo que declararon en la causa “es de oidas. Que uno les dijo, que otros le cotaron”. También hizo hincapié en las relaciones y sostuvo que “es algo obvio que si estas personas formaban parte de un mismo proyecto político tenían relación entre sí” y agregó que esas “relaciones no constituyen ningún delito”.

Por otra parte se refirió al cruce de llamadas y señaló que “el problema es que intentan dar por acreditado un contenido” cuándo en realidad solo se informa que el llamado existió y la duración. “Cualquiera que participa de una actividad en común se llama por teléfono” dijo.

Sober la situación de su defendido y la acusación del policía Coronel de haber visto cheques entre las pertenencias de Alzugaray y haber escuchado que había formado parte del secuestro, Orellano cuestionó el proceder del oficial. “Si tenía los cheques por qué no se los secuestró en el momento, si siendo policía tiene la facultad de hacerlo?” se preguntó. Asimismo destacó que “sabiendo que Alzugaray iba a negar los dichos (según Coronel) por qué no tomaron el recaudo de grabar la conversación o tener algún testigo”. Y destacó dos hechos: que los detenidos con su defendido firmaron las declaraciones sin que se les permitiera leerlas y que ninguno de los detenidos confirmó que tuviera cheques. Y puntualmente en este punto dijo que “el cheque que aporta Coronel, que ni siquiera le secuestran a Alzugaray; es uno cobrado dosmeses antes en Morón”.

Para finalizar el Dr. Paul Orellano dijo que “hubo dos testigos que vieron a jerez en la ruta rumbo a San Clemente” el día de la desaparición cerca de las 13.30 hs y que habría que creer en su declaración. Y sostuvo que el juicio y el pedido del fiscal “se encuentran en el terreno de las hipótesis porque no hay prueba directa que acredite nada”.

Escuchá el audio del resumen de 4 horas, en pocos minutos,  de los primeros alegatos: